La espiral descendente

Amazon.com Es fácil entender por qué Nine Inch Nails se convirtió en la banda industrial que salió del gueto techno y ganó una audiencia más grande. Trent Reznor, que graba los álbumes de NIN casi en su totalidad por sí mismo (aunque realiza giras con una banda completa), se esfuerza mucho por hacerse pasar por un joven enojado, pero debajo de las letras llenas de angustia, los sintetizadores golpeando y las guitarras chirriantes es una sensibilidad pop incontenible. En el segundo álbum de larga duración de NIN, The Downward Spiral, Reznor construye sus construcciones de ruido y tristeza en torno a melodías cálidas y difusas. En el primer sencillo del álbum, "March of the Pigs", por ejemplo, Reznor grita acerca de los cerdos alineados para el matadero en medio de guitarras que chillan de dolor. De repente, las guitarras caen para revelar la pista rítmica sensualmente palpitante debajo; luego eso desaparece para revelar una pista de voz y piano que es tan pegadiza como cualquier cosa de Elton John. Debido a que Reznor maneja mejor la dinámica ahora, el núcleo melódico es más obvio que nunca. --CD de descripción del producto de Geoffrey Himes